Roots & Shoots, en español Raíces y Brotes, cumple tres décadas desde que Jane Goodall lo inició en Tanzania. En Chile funciona desde 2013 y para celebrar la ocasión, hemos compilado algunos de los proyectos que se han realizado en el país.
Anualmente el programa trabaja junto a personas en la organización de proyectos enfocados en temas medioambientales y comunitarios con grupos de niños, niñas y jóvenes. Con la pandemia y el cambio a modalidad online llegó la posibilidad de expandirse a más regiones del país, lo que les ha permitido llevar a cabo proyectos más remotos.
Como es el caso de la profesora Monty Melendez, quien en 2020 presentó dos proyectos desde la región de Antofagasta. Uno fue una campaña de invierno para ayudar a animales callejeros, que está desarrollando una nueva versión este año. Y por otro lado, trabajó con niños y niñas en la difusión de la ranita del Loa para concientizar respecto a su estado de conservación. Este último proyecto tuvo especial relevancia porque la rana del Loa fue la embajadora del Día de la Fauna 2020, evento impulsado por el Instituto Jane Goodall y que les permitió generar una colaboración con el Zoológico Nacional, donde le dictaron a los estudiantes enriquecedoras charlas sobre la especie.
Otro de los proyectos destacados de este programa es el “Proyecto Utopía”, creado por un curso del Colegio Navarra de Puente Alto en 2018. Durante un año las y los jóvenes de tercero medio reunieron botellas plásticas recicladas para crear huertos verticales para la comunidad de su escuela y siguieron trabajando en el proyecto hasta que salieron de su enseñanza media. Los huertos fueron cultivados mayormente con plantas medicinales para beneficiar y ofrecer su uso a la comunidad.
María Francisca Ríos, profesora guía del “Proyecto Utopía”, explica que los y las jóvenes trabajaron en la recolección del material en puntos limpios, la preparación del material (pintar las botellas para que las raíces no reciban luz), entre otras cosas. Y destaca que “el aporte más grande de Roots & Shoots fue hacer que los niños se sintieran parte de algo más grande […] Era importante para los niños ver que había más gente que hacía lo mismo, que era una preocupación entre los jóvenes, los motivó un montón”.
Este año la convocatoria para inscribirse dura hasta el 31 de julio y la plataforma online del programa ha sido rediseñada para poder acceder a charlas y material de apoyo al aprendizaje sobre la creación de los proyectos. La coordinación de Roots & Shoots Chile invita a sumarse a este programa con nuevas acciones para cambiar al mundo.
